28 Jun María Eugenia Vergamini: “Drolanca ha sido mi segunda casa”
María Eugenia Vergamini, o María, como todos la conocemos, una mujer que expresa estar agradecida con Dios es, ciertamente, una persona bendecida, con una humildad que no opaca en absoluto su dedicación y amor a la empresa. Llega a Drolanca un 6 de octubre del año 2003, como pasante de Visitador Médico, para luego desplazarse en diversas áreas en las que logró aprender tareas más allá de las que en sus comienzos tenía asignadas.
Su paso, inicialmente de un mes, terminó convirtiéndose en un contrato por tiempo determinado, para quedar, a los tres meses, como trabajadora fija, gracias a su entrega y dedicación en su de- sempeño, labor reconocida por sus supervisores. María se destaca por su sencillez, espontaneidad y una alegría que contagia a todos los que están a su lado, cualidades que ha mantenido durante todos estos años, a pesar de las situaciones de gran presión, circunstancias adversas o cambios inesperados, atesorando recuerdos especiales de cada momento vivido. Todas esas experiencias la han convertido no solo en esa colaboradora singular que vemos a diario, sino también en maestra para sus mismos compañeros. En la actualidad, se desenvuelve como Supervisora de Operaciones en el Área de Recepción de Mercancía.
Nos señala que son muchas las personas que han confiado en ella y que le han brindado tiempo y preparación, como Jorge Torres, Liliana Salazar y Jorge Araque, este último, elemento vital de enseñanza y su actual jefe. También nos dice que sus estudios superiores los logró aquí, gracias al apoyo incondicional de la Dra. Mitchell Ferrer. En lo personal, se ríe cuando comenta que empezó en Drolanca “con esposo, pero sin hijos”, ya que sus tres muchachos llegaron al mundo, siendo ella trabajadora activa de la empresa. De esta forma, Josué, Hermes y Nazaret, al igual que su esposo, se han transformado, en cierto modo, en íconos muy queridos por sus compañeros de trabajo.
María se define como una persona humilde, comprometida siempre con Drolanca, poseedora de un sentido de responsabilidad en todo lo que emprende y desarrolla. De aquí, su mensaje a las nuevas generaciones, a quienes les recomienda en todo momento que aprendan todo lo que puedan, que no se detengan, pues lo adquirido forma parte del crecimiento laboral y personal. Sin lugar a dudas, su compromiso y vocación, así como la pasión que desborda y transmite a los demás, pintan en los muros de la Corporación el nombre de María Eugenia Vergamini como uno de los Constructores de la Historia de Drolanca.
